Antoniuskirche es un impresionante edificio contemporáneo resultado de la creatividad futurista de Karl Moser y el trabajo de la empresa constructora Doppler y Sohn.
Construida entre 1925 y 1927 en el distrito de St. Johann de Basilea, fue la primera iglesia suiza construida con la técnica del hormigón en bruto.
La estructura: tamaño y materiales
Con una longitud de 60 metros y una altura y ancho de 22 metros, esta iglesia posee la majestuosidad de una catedral.
El campanario de 62 metros de altura se eleva por encima de todos los edificios circundantes del distrito y es visible desde muchos puntos de vista.
Aunque en su momento no a toda la población le gustó la opción de dejar la estructura sin yesos ni superficies decorativas, en 1987 la Antoniuskirche fue reconocida oficialmente como edificio histórico.
Las vidrieras con historia de la Antoniuskirche
Las vidrieras de la Antoniuskirche, que miden 4,8 metros de largo y 13,8 metros de ancho, rompen la continuidad del hormigón y crean efectos de luz evocadores en el interior del edificio. Las vidrieras historiadas son once y fueron creadas por los artistas Hans Stocker y Otto Staiger entre 1926 y 1930. Cada una de ellas representa un capítulo de la vida de San Antonio o un personaje importante del Evangelio.
La decoración de la iglesia
En el interior del edificio, el altar principal y otros dos altares laterales están revestidos con Klinker rojo oscuro / marrón, así como el área del coro.
Un majestuoso púlpito suspendido en el pasillo está adornado con bajorrelieves de latón y un amplio techo cuadrado sostenido por delgadas columnas.
Los bajorrelieves como decoración interior
Diferentes zonas del edificio fueron decoradas con bajorrelieves de latón: sobre el altar mayor, sobre el púlpito y sobre los muros interiores de hormigón. Su tamaño los hace fácilmente reconocibles por visitantes y creyentes.
El baptisterio
El baptisterio de la iglesia, con una bóveda en parte con forma de barril, se restauró completamente en 2012. Sus paredes rojas, cuyo color contrasta con la austeridad del hormigón, se dirigen hacia el altar. Allí se ha restaurado con cuidado un cuadro de August Wanner de 1928.
La Antoniuskirche, hoy
La Antoniuskirche es hoy reconocida como una obra maestra arquitectónica y, como tal, está señalizada en muchas guías turísticas nacionales. Es el destino de un gran número de visitantes y estudiantes de diferentes países.
Fotos © Felix Leo – Iglesia de San Antón www.antoniuskirche.ch